Trucos para maquillarte los ojos

Para las mujeres maquillarse es algo muy importante, así que
sigue estos trucos para maquillarte los ojos para que luzcas sensacional.

Entre los mejores trucos para maquillarte los ojos tenemos:

Ahora es el momento de usar ese tubo de imprimación que te
convencieron de comprar pero que nunca usaste. La imprimación es el secreto de
un maquillaje perfecto, aplícala sobre tus párpados para mantener la sombra de
ojos en su lugar e incluso puedes aplicarla en tus pestañas. Un buen truco para
recordar es que una cartilla también se puede usar para limpiar errores.

Ahora que estamos envejeciendo no podemos evitar notar las áreas ligeramente oscurecidas alrededor de nuestras cuencas de los ojos. ¿La solución? ¡Corrector! Elija una o dos tonalidades más claras que su tono de piel normal y aplique el corrector con las yemas de los dedos para pintar las esquinas internas de los ojos, por ejemplo, ya que éstas tienden a oscurecerse primero.

Esto probablemente se aplica a las mujeres más maduras, pero
a medida que envejecemos, añadir tanto delineador y sombra de ojos no sólo
parece un desorden, sino que parece añadir años a tu mirada. Barre una sombra
de ojos desnuda durante el día, y por las noches aplica un color ligeramente
más oscuro en el pliegue para añadir definición. Asegúrate de mantenerte
alejada de tu ceja. Elija siempre la opción de sombra de ojos más cara, ya que
éstas tienden a tener más pigmento y poder de permanencia.

Si no puedes resistirte a la mirada de las sombras de ojos
de moda del momento, entonces no lo hagas. Si se te antoja un aspecto rosado,
por ejemplo, asegúrate de elegir un rosa sutil y aumentarlo gradualmente. Al
aplicar las sombras de ojos del momento, aplícalas en un movimiento circular en
el pliegue que va ligeramente más arriba para que el color pueda ser aún
evidente incluso sobre los párpados encapuchados.

Puede que quieras evitar el forro grueso de la espalda, pero
si no puedes dejarlo, entonces mójalo con un bastoncillo de algodón. Pero en
general, el delineador de ojos marrón es más indulgente. También puedes usar
una sombra de ojos oscura para emular el aspecto del delineador, frotando las
esquinas exteriores de tus ojos con un pincel de maquillaje. El delineador
líquido se vuelve menos recomendado a medida que envejecemos, pero si no puedes
vivir sin él, el truco es mantener la línea delgada.

Aunque muchos maquilladores empiezan a evitar aplicar el
delineador a las pestañas inferiores, pero en realidad el delineador de las
pestañas inferiores abre los ojos. Alinear el párpado inferior justo debajo de
las pestañas y suavizar la mirada con el meñique. O podrías sumergir un pequeño
pincel en el color de sombra de ojos más oscuro de tu paleta y dibujar una
línea bajo el ojo. Esto te ayuda a crear un aspecto natural y sucio que se ve
muy bien.

Aplicar el tono correcto que coincide con su coloración hace
maravillas para usted. Los ojos marrones se ven muy bien en todos los colores,
los ojos verdes se ven mejor con un poco de púrpura, mientras que los ojos
azules saltan con tonos tierra. Averigua cuál es la mejor combinación y
experimenta hasta que la consigas.

A medida que envejecemos se hace imprescindible el uso de un
rizador de pestañas. Para obtener mejores resultados, calienta tus pestañas con
un secador de pelo durante unos segundos, siéntelas para que no estén demasiado
calientes para tu ojo, y luego rízalas.

Elija las máscaras de alargamiento en lugar de las de
volumen. Necesitas longitud y no volumen para contrarrestar los efectos de los
ojos que desafortunadamente han empezado a hundirse. Empieza a aplicar la
máscara desde la raíz moviendo la varilla hacia delante y hacia atrás para que
consigas todo lo que puedas en la base de las pestañas. Aplica la segunda y
tercera capa mientras las pestañas estén todavía húmedas con el rímel. En las
pestañas inferiores, simplemente aplique la varilla del rímel en las pestañas
para obtener una mayor definición.

Las cejas te enmarcan los ojos y si usas gafas, es una razón
más para prestar atención a tus cejas. Rellene las zonas más escasas con una
sombra o con un lápiz fino, con trazos cortos de plumas. Sólo tienes que fingir
la aparición de más vello en las cejas.